El desafío al que se enfrentan muchas ciudades es el espacio. Nadie quiere derribar monumentos históricos, pero los edificios antiguos no siempre aportan la densidad necesaria para el trabajo y los hogares en las ciudades modernas. Algunas ciudades renuevan espacios que anteriormente albergaban fábricas o almacenes. Nueva York contaba con uno de estos. El único problema era que el espacio en cuestión también tenía un almacén ferroviario vital en funcionamiento y una zona de tránsito justo en el centro. ¿Qué se podía hacer?
Un edificio en el tejado
La solución era obvia: ¡construyamos un tejado! ¡O incluso dos! Este barrio de 11,3 hectáreas se está levantando sobre dos plataformas que a su vez cubren el patio ferroviario más concurrido de EE. UU. con 30 vías de tren activas y cuatro túneles.
Por supuesto, los rascacielos necesitan un soporte mucho mayor que este; por eso 300 pozos de cimentación de entre 1,2 y 1,5 metros de diámetro se elevan desde los cimientos y a través de los tejados del patio ferroviario. Estos cimientos están anclados en el suelo a una profundidad de entre 6 y 24 metros y situados entre las vías para permitir un tráfico ferroviario ininterrumpido.
Lo que 25 000 millones de dólares pueden comprar
Pero ese ha sido solo el comienzo. Sobre estas plataformas y cimientos se ha ido creando un espacio redesarrollado de aproximadamente 1,7 millones de metros cuadrados. Se trata de la mayor obra de desarrollo privado en la historia de EE. UU. y tiene un coste de unos 25 000 millones de dólares.
Este megaproyecto cuenta con dos fases, la primera de las cuales se completará en la primavera de 2019. El objetivo principal es el de crear más espacio para que la economía de la ciudad se expanda y hacer un mejor uso de esta ribera fluvial de la parte oeste de Manhattan. La planificación y el apoyo municipales han sido cruciales: la ciudad ha invertido enormemente en la infraestructura creada alrededor de este proyecto.
Conexiones integradas
La inversión municipal ha incluido la ampliación de la línea 7 del metro para la conexión de Hudson Yards. Esto también implica la construcción de una nueva estación de metro, la primera de Nueva York en los últimos 25 años. La popular High Line, un paseo peatonal elevado, también se ha ampliado para formar un bucle alrededor de la parte oeste del conjunto.
Para los edificios del proyecto, los desarrolladores han optado por soluciones de movilidad rápidas y eficientes, incluyendo el ascensor TWIN de thyssenkrupp Elevator, que supone un gran ahorro de espacio. TWIN es el único sistema de ascensores del mundo con dos cabinas independientes en un mismo conducto. Su debut en Nueva York será en Hudson Yards.
“Hemos llevado a cabo numerosos estudios de tráfico para demostrar que TWIN podría suponer un significativo ahorro de costes de construcción para propietarios e inquilinos, además de un uso mucho más eficiente del espacio.”
Vida urbana con todo lo necesario
Atraer a empleados y al futuro del trabajo fueron claves para vender la idea de Hudson Yards tanto a la ciudad como a los inversores. Una “ciudad dentro de otra ciudad” bien planificada permite a la gente vivir, trabajar y disfrutar de su tiempo de ocio en un mismo lugar, lo que atrae especialmente a gente joven con agendas de trabajo poco convencionales y estilos de vida modernos.
Por ello, Hudson Yards incluye 4000 viviendas, espacio para oficinas, opciones recreativas, más de 100 tiendas, restaurantes, cafeterías y un colegio público. No se trata solo de un desarrollo de uso mixto. Hudson Yards está diseñado para que no sea necesario salir del barrio, ya que contará con todo lo necesario.
El barrio se digitaliza
La convergencia de las ciudades inteligentes con hogares también inteligentes es algo muy presente en Hudson Yards. El “Center for Urban Science and Progress” de la Universidad de Nueva York ha llenado el barrio de dispositivos para la recopilación de datos y ha diseñado hábilmente el sistema para adaptarse con facilidad a nuevas y futuras tecnologías.
Además de sensores conectados digitalmente que monitorizan la calidad del aire, el ruido, el tráfico, el calor y el consumo energético y de agua, una serie de aplicaciones opt-in para móviles o aplicaciones para el hogar ayudarán a recopilar datos sobre la salud y las actividades de los usuarios. Los sistemas críticos emplean tecnología de mantenimiento predictivo como MAX, de thyssenkrupp Elevator, que reduce los tiempos fuera de servicio a la mitad. En Hudson Yards, incluso el suelo tiene sensores integrados.
Preparándose para el futuro
“Inteligente” es un adjetivo que describe también muchas de las características de sostenibilidad de Hudson Yards. Una micro-red instalada in situ y unas turbinas supereficientes accionadas por gas reducen los gases de efecto invernadero y proporcionan una cierta resiliencia contra los apagones. Los ascensores TWIN reducen el consumo eléctrico a la mitad, y la iluminación inteligente supone además un ahorro extra.
Asimismo, anualmente se reciclan 38 millones de litros de agua de lluvia y los conductos de eliminación neumática de residuos han reemplazado a los camiones de basura. Los sistemas de gestión de edificios están eficientemente conectados a través del IoT, y tampoco es ninguna sorpresa que Hudson Yards cuente con el primer edificio de Nueva York con un certificado LEED Platinum.
El espacio intermedio entre la vida y el trabajo
La mitad del espacio de suelo de Hudson Yards se ha destinado a espacio público al aire libre. Son casi cinco hectáreas que incluyen parques, jardines, parques infantiles y plazas, además de un nuevo y particular centro para artes escénicas: The Shed. Estos espacios conectan también de forma fluida tanto con el parque de High Line como con la orilla del río.
El arte público está presente en todos sitios, pero en ninguno destaca tanto como en Vessel, obra de Heatherwick Studio, el elemento central de la plaza situada en el corazón de Hudson Yards. Este monumento de 16 plantas tuvo un coste de 150 millones de dólares, pero ofrece un viaje urbano único (y gratuito) a través de sus rampas, ascensores y 2500 escalones.
El crecimiento comienza con la imaginación
Tal y como Nueva York ha descubierto con el proyecto de Hudson Yards, las ciudades disponen de mucho espacio para innovar y crecer. Los límites y las estructuras existentes son desafíos, pero no problemas. Lo único que hace falta es un poco de imaginación.
En este caso, la construcción de una nueva plataforma fue lo único que hizo falta tanto para proteger una infraestructura previa como para conseguir espacio para un nuevo barrio completamente inteligente, sostenible y conectado. En su búsqueda creativa de nuevos espacios, Nueva York ha redescubierto el gran potencial de una ciudad con varios niveles.
Starchitect firms add sparkle to Hudson Yards
Kohn Pedersen Fox (KPF) provided the overall design, as well as designing 10 Hudson Yards (268 m.) and 30 Hudson Yards (386 m.), which features the highest (and breathtaking) outdoor observation deck in NYC. 15 Hudson Yards (278 m.) was designed by diller scofidio + renfro and the rockwell group, while SOM designed 278-m 35 Hudson Yards. Here are some more:
- The Shed – designed by diller scofidio + renfro, and features mobility solutions from thyssenkrupp Elevator.
- 50 Hudson Yards (308 m.) – designed by Foster+Partners and set to open in 2022, with 40 energy-saving TWIN elevators.
- 55 Hudson Yards (240 m.) – designed by KPF, it links the new No. 7 subway line with 27 state-of-the-art thyssenkrupp elevators.
Image Credits
Hudson Yards, photo by Narain Jashanmal, taken from unsplash.com
Weehawken, photo by Sandy Ching, taken from unsplash.com
603 W 30th St., photo by James Morehead, taken from unsplash.com
Hudson Yards, photo by Gary Hershorn, taken from curbed.com
Con información de Urban Hub